Destino costero con playas doradas, castillo con vistas, arquitectura modernista y vibrante vida nocturna, ideal para sol, diversión y relax.

Este destino costero es conocido por sus impresionantes playas de arena dorada y aguas cristalinas, que atraen a turistas de todo el mundo. Entre sus principales atractivos se encuentran el castillo de Sant Joan, que ofrece vistas panorámicas de la costa, y la iglesia de Sant Romà, famosa por su arquitectura modernista. La historia de la zona se remonta a la época romana, y su evolución como un popular destino turístico comenzó en el siglo XX, cuando se desarrollaron infraestructuras para recibir a visitantes en busca de sol y diversión. Además, la vida nocturna vibrante y una amplia oferta de actividades acuáticas hacen de este lugar un punto de encuentro ideal para quienes buscan entretenimiento y relax.